Porque un idioma nos permite expresar nuestros sentimientos, no podemos privar a nuestros estudiantes de la oportunidad de manifestarlos y acompañarlos con la ayuda de la música tan presente en el inglés. Por ese motivo, los chicos disfrutan aprendiendo a memorizar las letras, que al ir acompañadas por el lenguaje corporal, les permite interiorizar el significado de las palabras y expresiones. La forma en la que tienen que pronunciar y entonar, hace que su comprensión oral mejore porque pueden identificar la fluidez con la que unas palabras se unen a otras cuando se recita.  Con ese objetivo, ya hemos dejado atrás la Navidad y el Día del Padre, y estamos ilusionados con la preparación del Día de la Madre.